Reencuentro con la Diosa y Madre del CieloVíctor. Arturo. Cabello. Reyes“The Heyoka consequently experienced a social alienation, ceremonially and in daily life, in some ways similar to of a MADMAN.’’
(William S. Lyon, Encyclopedia of Native American Healing, London, 1996, 105)
“You want to know who’s a real medicine man? He’s the one who doesn’t ask you to come to him. You’ve got to go and ask him. And you’ll find he’s always there among his own people.’’
(Louis Farmer, Grandfather-Onondaga)
Suele afirmarse que entre Pueblos Originarios de América existen leyendas tradicionales fuertemente preservadas y transmitidas dentro de ciertas ordenes o clanes y que solamente pueden ser debidamente asimiladas a través de rigurosos y arduos procesos iniciáticos de enseñanzas. La búsqueda de la deidad femenina y es parte integral de ese reeencuentro con el poder femenino que habita en todos.
Podemos confirmar que algunas de esas leyendas tradicionales son manejadas con gran estilo y el más fino empeño de parte del Heyoka (“Haokah”, “Heyokha’’) = Payaso Sagrado.
La figura de la Gran Diosa es parte esencial del mismo sentido del círculo de la Medicina. Su expresión simbólica se encuentra en cada una de las hermanas que transitan la Rueda Medicinal en cada punto de su expresión de sabiduría y tradición.
Es proceso dinámico que tiene el efecto de manifestarse en poderes internos conscientes e inconscientes, positivos y negativos.
La Gran Madre es parte de ese ''arquetipo femenino universal'' =Magna Mater o Gran Madre.
Ella habita en el gran círculo=Ouroboros apareciendo como símbolo de la totalidad y reintegración entre una lucha dialéctica{personal} de interpenetración, coexistencia y antagonismo. La Diosa de empuja y de atrae!
Entre Pueblos Originarios de América el carácter esencial de lo Femenino-tipo del matriarcado- se substrae del potencial latente de ese mismo poder femenino.
Es gracias al Payaso Sagrado que esa esencia latente y escondida de la diosa femenina puede aflorar.
Por ello, este payaso divino es Maestro inigualable de enseñanza espiritual.
Un Hijo de los Seres del Trueno, Rayo y Relámpago, sus acciones, conducta y actuaciones están totalmente cargadas de singular Poder.
Él logra ayudar a desperatar a la diosa escondida al liberar las tensiones y las cargas energéticas dentro de los procesos iniciáticos. La Rueda no tiene una sola definición; es de todos y para todos.
No ignoramos que este personaje único es conocido, temido y respetado entre grupos tribales; los Assiniboin, Plains-Ojibwa, Plains-Cree, Ponca, Lakotas y, Dakotas, entre otros grupos aborígenes de considerable tradición.
El Heyoka o payaso sagrado es –lamentablemente para muchos=su propio espejo abundante entre múltiples reflejos de la burla, faltas, ''pecados y errores personales escondidos'' y difícilmente admitidos.
En estos tiempos en que las enseñanzas espirituales se tratan de desvirtuar entre aquellos que venden iniciaciones y danzas y hasta ponen precio a lo sagrado; como en botica.
El poder de la Rueda y del Payaso sacro entran ellos con su magnífico poder de lograr desmitificar y quitar la máscara de la ignorancia. Atentos a los mensajes del Heyoka el Hijo de los “Thunderbeings’’. Son los ''Seres del Trueno o del Rayo'' quienes giran las cosas al revés y entre sueños visionarios de resplandores pueden VER, lo que otros, no pueden ver.
(John Fire Lame Deer)
Obvio seria decirles que es también el Heyoka un poderoso “chamán’’ que como espejo reflector de piedra de obsidiana, puede reflejarnos y revelarnos contenidos ocultos y misteriosos de nuestro inconsciente personal y colectivo.
“The Heyoka consequently experienced a social alienation, ceremonially and in daily life, in some ways similar to of a MADMAN.’’
(William S. Lyon, Encyclopedia of Native American Healing, London, 1996, 105)
No puede existir una verdadera danza de la Abuela Luna sin él, ya que como payaso divino usa su ‘’ironia y buen humor’’ para despellejar y desmembrar el mal humor de otros contribuyendo a desinflar el ego vanidoso de todos aquellos/as que se creen infalibles.
Bien decía el Abuelo Black Deer, que el poder del trueno del Heyoka era tal que hasta podía dirigir sus flechas y dardos hacia aquellos malagradecidos/as cuya soberbia y orgullo eran de tal magnitud y naturaleza que jamás podían agradecer la mínima procedencia de su conocimiento.
Muy lógico nos parece cuestionar para que compartir vanamente la pipa de obsidiana o la danza de la luna si en tu corazón existe el remordimiento, la amargura y desfallece tímidamente y amargamente el mínimo indicio del perdón. Para la danza sagrada y el Camino Rojo solo se necesita vestirse con la simple piel de la HUMILDAD.
Pues nosotros creemos que El RESPETO a los seres del GRAN MISTERIO nace de la humildad y entrega sencilla, humilde y simple.
El Gran Misterio habita al frente de tu nariz. No hay que buscarlo en ningún lado pues se encuentra en todos lados y en cada viento.
Habita poderoso en la sencillez del TODO.
Bien nos decía Buffalo Jim: “White man always wants to know what he can’t understand’’.
Entre estos grupos van resurgiendo otros grupitos de fuertes tendencias matriarcales-que debemos vigilar con atención-, quienes ''todo lo que les huele a varón'' a macho! es verdaderamente un temible problema excluyente de machismo y testosterona.
Son ellas quienes luego suelen por costumbre echarle toda la culpa a los ''malditos hombres como los lujuriosos, lascivos y salvajes''.
De esta forma -muy solapada- empujan sus agendas escondidas entre proclamas de ''Poder Femenino'' chicas débiles y toques y retoques para uso o desuso. Cuidado este no es el Sendero ni las prácticas correctas.
Ya en muchos lugares del planeta, lo que en principio resultaba ser visto con gran agrado y honestidad -para honrar el poder de la Divina Madre y Diosas Femeninas-, ha ido hoy en día tomando giro inesperado y ''precavida aceptación''-con carácter más sigiloso y e cuidadoso entre todos. Pero; hay casos y hay otros casos. ¡Que conste!
Ni la energía, ni el viento, ni el cielo se pueden vender, el verdadero poder se transmite y no se puede vender.
O es que ni tan siquiera entienden el mensaje del sabio Jefe Seattle (enero de 1855): “¿Quién puede comprar o vender el cielo o el calor de la tierra?’’.
“El hombre no creo la trama de la vida, es solo una fibra de la misma.’’
(Chief Seattle)
La energía femenina con todos sus poderosos ciclos lunares y menstruales tiene que estar en total balance y armonía entre partes. Si falta el SOL, la Luna no puede brillar ni tiene su LUZ.
Y sin la luz de la luna, no existe la conexión entre siembra y cosechas.
Para lograr la expansión y ascensión espiritual de TODA la humanidad; ambas energías deben complementarse totalmente y de forma armónica, sin exclusión y género.
Cuenta la Abuela Arana que El Gran Misterio-Sakoiatisan, Taiowa, Kitche Manitou o Wakan Tanka-para crear a la mujer antes de aparecer la Dama de la Luna, llamó a todos los planetas y los reunió en el cielo. Luego, al crear a la mujer, establece una alianza entre la tierra y la luna a través del poder del rayo y trueno y coloca el arcoíris para que ''la mujer pudiese caminar sobre sus rayos''.
Pero debemos advertir que según la tradición del Heyoka entre señales de tiempos finales dos cosas se perderían, una el conocimiento del lenguaje sagrado, y la otra el proceso sagrado del Abuelo Fuego.
Los Onondaga afirman que el verdadero Fuego Central no está hecho de madera y flamas sino que se encuentra depositado en lo más profundo del corazón.
Todo el Poder descansa en la Sabiduría y permanencia de fundamentos del Círculo Sagrado.
Para poder ser verdadero Heyoka es fundamental haber tenido visión o ensoñación con el poder del Gran Pájaro del Trueno=(Wakinyan Tanka).
Para poder ser un “Trickster’’, es decir las cosas que otros no se atreven a decir y hacer lo que jamás otros harían. No es sabio ni prudente ser Heyoka por mucho tiempo.
Al ser aliado del Poder del Gran Pájaro del Trueno estos personajes tienen un poder muy destructivo en su energía y quien se acerca a ellos -por mera curiosidad-, puede ser “quemado por su poder’’.
El Pájaro del Trueno le envía su poder en el zig-zag de la forma de su rayo. Valga aclarar que estos seres espirituales o Thunderbirds –Wakinyan Tanka-suelen alejarse y esconderse de todos aquellos lugares donde no exista higiene, y abandonan inmediatamente ceremonias y círculos medicinales que admitan vicios y bebidas embriagantes, bailes y botellas profanos.
El Abuelo Lame Deer afirmaba categóricamente: “Wakinyan hates all dirty’’.
Cuentan los Abuelos-Ancianos que una tarde la Dama o Princesa del Cielo, -desobedeciendo por pura vanidad y arrogancia el mensaje de los Seres del Trueno-, se acercó sin precaución alguna a ver que lo que sucedía cuando toda a tierra estaba cubierta de agua.
Ella deseaba por su mera curiosidad y malagradecida “husmear’’ desde su cómodo “castillo del cielo’’.
Fue entonces, que el 'Gran Pájaro del Trueno', quien protegía fuertemente y custodia el oeste=son cuatro, vestido con su ropa de nubes hace sonar su poder del trueno y resplandor del rayo'.
Y, entonces…la damita se cayó del cielo…
Reencuentro con la Diosa y Madre del Cielo
Víctor. Arturo. Cabello. Reyes
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